domingo, 17 de julio de 2011

Banana Yoshimoto y sus 5 relatos.

Conozco bien esa sensación del cuerpo contracturado y del alma tensa, cuando la malea moderna azota el bienestar ampliamente definido. Cuando la añoranza de la seguridad y confort descoloca nuestros días. Esas jornadas que necesitamos tomarnos una infusión arregla-todo, un analgésico existencial. Esos días leo a Banana Yoshimoto: el calor de sus cuentos que, como las hojas de ginkgo biloba, tienden sobre mí su poder anti-inflamatorio, estimulante, antioxidante. Dicen que ginkgo es una planta cuyas propiedades son beneficiosas para el sistema nervioso, que mejora la circulación. Así es la prosa de Banana Yoshimoto. Refrescante y confortante. De sabor y aroma muy agradable.
Hace unas semanas la editorial Tusquets publicó "Recuerdos de un callejón sin salida", una recopilación de 5 relatos de Banana Yoshimoto. Aprovecho la ocasión para dar las gracias por regalarme un libro para poder disfrutarlo y compartirlo con los lectores del blog.
Antes de contar mis impresiones, os introduzco en el ambiente citando la sinopsis oficial del libro:
 
Cinco personajes que, tras vivir momentos dolorosos, se preguntan sobre el sentido de la vida, y sobre la posibilidad de ser felices, vertebran los cinco relatos que componen este volumen. Si, en «La casa de los fantasmas», dos compañeros de universidad traban una intensa amistad que tras una larga separación se convertirá en un amor profundo, el segundo relato, «¡Mamaaa!», narra la historia de una joven que trabaja en una editorial y que, tras un incidente, tardará en recuperar la fe en las relaciones humanas. A su vez, «La luz que hay dentro de las personas» relata una hermosa pero trágica historia de amistad entre niños. En «La felicidad de Tomo-Chan», la ingenua protagonista consigue, pese a la adversidad, no perder jamás la esperanza y disfrutar de lo que le brinda el día a día. Por último, en «Recuerdos de un callejón sin salida», Mimi se desmorona cuando descubre que su novio la ha abandonado, y sólo la relación con Nishiyama, un joven que trabaja en un bar situado en un callejón sin salida, la ayudará a superar la tristeza. 
***
En el callejón sin salida llueve, caen hojas de los recuerdos, llueven flores marchitas de la soledad, se oye el crujido de la nostalgia y el frú frú del desamor. En el callejón sin salida, el lector acompaña al “yo” aturdido, siente como este cae, como se estremece. Es el testigo de su renacimiento.  

En los cinco cuentos, encontraremos tan familiar ya (tratándose de Banana) vehículo de emociones, el transportador de sufrimientos, de dolor, una lanzadera que lleva a la reconciliación muy íntima con las experiencias. Estos relatos cuentan la perdida del vínculo entre el cuerpo y su sombra, la búsqueda y el reencuentro.


Banana, la poseedora de incomparable sensibilidad de lo intangible, modela cosas duras, las desprovee de dolor, agita y describe de tal modo que parecen un recetario del sosiego.

La autora, aparte de preparar sus beneficiosos guisos literarios, nos concede la lista de los ingredientes - diferentes maneras de restaurar los vínculos con el pasado, consigo mismo. Sus cuentos se convierten en un taller de reconstitución, un intento de enriquecimiento personal paralelo a un retorno del viaje de la introspección.

Salimos de la lectura fortalecidos, más maduros, atravesamos una especie de tratamiento exfoliante suave. Conseguimos paz sin sacudidas, entre estos 5 relatos vestidos de estilo llano, con sentimientos mayores en relieve. Nos volvemos a descubrir motivados por las palabras de Yoshimoto, por su texto terso de la vida, con bordado muy sutil de soledad, miedo y sufrimiento.



Os recomiendo calurosamente "Recuerdos de un callejón sin salida", esas cinco historias que podrían pasarle a cualquiera, historias que nos pasan/han pasado a muchos de nosotros.
Dejemos que Banana nos enseñe como mirar hacía el pasado sin dejarse aniquilar por el vaho de lo olvidado. Intentemos limpiar las legañas del dolor para ver con claridad un presente más feliz. Aquí y ahora. Yo feliz. Eso es lo que cuenta.
***
Os dejo un trailer del libro. Recordad, amigos... en el callejón sin salida, caen hojas de... ginkgo biloba. 



Primeras páginas: Adelanto en la página de Tusquets Editores.


Fotos de la entrada: Dreamflow. Muchas gracias.
Gracias a Tusquets Editores por mandarme un pack decontracturante- el libro de relatos de B. Yoshimoto junto con una colección de puntos de libro inspirados en novelas de Haruki Murakami. 
La libreta de Tokio Blues, una preciosidad. 

4 comentarios:

  1. Esa novela me llama mucho, pero creo que antes de comenzar con Banana debo empezar con el maestro de la literatura japonesa. En agosto tendré entre mis manos un ejemplar de "Tokio Blues" y realmente espero que sea tan bueno como me han dicho. Un saludo.

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  2. tal y como suena apetece mucho leerlo y tal vez mas de una vez...

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  3. @Lilith En realidad no es una novela sino una colección de relatos. De Banana te recomiendo "Kitchen". Si quieres conocer a Murakami, lee todo menos Tokio Blues, es su novela menos representativa.

    @Lea Y tanto. Te lo presto, hermana;)

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  4. Le tengo echado el ojo, caerá más que seguro. Bsos

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