domingo, 6 de diciembre de 2009

Los churros me han podido... Cómo acabó "La Mécanica del Corazón" bajo mi cojín¿?


Una tarde en Barcelona,  una tarde a lo navideño… Unas tacitas de chocolate con churros en el café de la Plaza Universitat, el momento clave en el Portal de Angel, abarrotado por el consumismo sabadeño de un puente en crisis (!),  con la gente aplaudiendo cuando encendían las luces navideñas, el momento inolvidable, uno de estos que me recuerdan porque me gusta tanto vivir aquí, en el corazón de Catalunya, tan lejos de mi tierra…  Uno de estos momentos que te hacen sentir especial.

Chicas  vestidas de ayudantes de Santa Claus haciendo su coreografía, acompañadas por el sonido metálico de los timbres del vehículo mágico del Barbudo

Tenemos en Polonia esta costumbre, supongo que es de origen nórdica/germana que nos hace celebrar el día 6 de diciembre como el Santo de Nicolás, con los niños, esperando la mañana para comprobar qué regalos tienen bajo su cojín…

Me dejé llevar por este ambiente y en el fervor de compras, me llevé un ejemplar de “La mecánica del corazón” de Mathias Malzieu porque encajaba con esta fiebre pro-navideña, con el "calor humano" de esta tarde…Sí, es lo que estará bajo mi cojín mañana, el libro que me acompañará el día de la fiesta de Santa Claus…

Estaba indecisa, tenía muchas opciones para rellenar la cesta:
“El cielo es azul, la tierra blanca” de Hiromi Kawakami (me esperaré a la versión "debolsillo", ahora luce un precio demasiado alto, el pequeñajo de libro)
“Graceling” de Kristin Cashore (mañana toca el mercado de "ocio de segunda mano" ;) - el Mercat Sant Antoni, lo buscaré allí)
“Angel Time” de Anne Rice (tranquilo, que te tengo echado un ojo, pronto serás mío)
Pero me decidí darle oportunidad a "La Mecánica del Corazón” y me apresuré hacia la caja: casi aniquilo la cola de gente apretando nerviosamente sus articulos a pagar, como un predador acaricia la presa antes de devorarla... Y yo con mi "mécanica"...

La sinopsis de Fnac es esta:
En la noche más fría del siglo XIX, nace en Edimburgo, Jack, el frágil hijo de una prostituta. El bebé nace con un corazón débil y para salvarlo le colocan un reloj de madera al que habrá de dar cuerda toda su vida. La prótesis funciona y Jack sobrevive, pero debe respetar una regla: evitar todo tipo de emoción que pueda alterar su corazón. Nada de enfados, y sobre todo, nada de enamorarse. Pero Jack conoce a una pequeña cantante de ojos grandes, Miss Acacia, una joven andaluza que pondrá a prueba el corazón de nuestro tierno héroe. Por el amor que siente hacia la joven, Jack se lanzará a una aventura quijotesca que le llevará desde Edimburgo a París, a las calles de Granada, haciéndole conocer las dulzuras y durezas del amor.
Me dejé llevar, sucumbí a lo grande al consumismo (serán las luces o el chocolate que me puso en el carril¿?). La verdad es que quise tener este libro, leerlo, en el mismo momento que en su solapa encontré esta reseña…
“La mecánica del corazón es una joya. Con esta novela se siente el impulso de comprarla de diez en diez ejemplares para poder regalarla a nuestros seres queridos” (Philip Manche, Soir)
Mi ser querido me dio la luz verde… Si  Philip tiene razón, y resulta ser una joya.. se lo leeré a mi ser querido en voz alta, en una tarde de frío, acariciándolo con la calurosa palabra… como mejor sé…


***
Tenía ganas de un post sentimental, pues aquí lo tenéis... me desnudo nostalgicamente ;)
Ahora, me escabulliré a esconder el libro debajo de mi cojín...
Que mañana será lo primero que haré, comprobar allí, como en los viejos tiempos... que no sea que encuentre algo más;)

2 comentarios:

  1. Es una delicia la forma en que escribes, estoy disfrutando mucho con tus posts.

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  2. Eeehhh ;) ¡Me encantan tus allanamientos!
    Referente a mi "escritura", todavía cojeo un poco en castellano, por mucho que sea mi lengua preferida, hay huecos que es difícil rellenar no siendo nativa. Tengo a un Corrector potente en mi poder;), pero soy consciente que a veces suelto alguna bombilla, especialmente que mi forma de expresar, por regla general, es bastante emotiva y alguna que otra metáfora se me va de las manos.
    En todo caso: disfruto mucho trabajando en este blog;)

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